Por: Alfredo Holguín M.
Jueves 11 Abril 2013
Compañeros, en política 2+2 no suman 4
También el paro cafetero fue exitoso. De eso no
hay ninguna duda, pero además, los comunistas y otras fuerzas que integramos el
movimiento socio político Marcha Patriótica no solo nos solidarizamos, sino
que, modestamente, donde tenemos influencia, lo apoyamos material y
políticamente. No nos atravesamos como rumiantes yertos en la vereda, ni
impedimos el pronunciamiento de apoyo de las diversas organizaciones sociales
allí donde incidimos.
Nadie relevante, desde la izquierda, señaló a
Salvación Agropecuaria, ni a la dirección del PDA, como auxiliares del
expresidente Álvaro Uribe, quien de manera oportunista se sumó al paro
cafetero. Ningún sector consecuente tuvo la incongruencia de quitar el apoyo a
esta justa movilización, por el graznar, con el perdón de los pájaros, de los
adláteres de Uribe. Tampoco esgrimimos el carácter reaccionario que en el
pasado han tenido algunos de los medianos caficultores, ni inoportunamente nos
dedicamos a señalar, en ese momento, la sobreexplotación de los humildes
jornaleros del café por parte de los finqueros. Lo relevante, entonces, era
apoyar esa justa movilización y así lo hicimos.
Esa unidad de acción, la motivó la crítica
situación de este importante sector del agro. Nosotros fuimos sensatos en no
reproducir la injuria del Gobierno, al afirmar que el senador Robledo y la
compañera Clara López, directa o indirectamente, apoyaban la reelección del
uribismo. En esa misma dirección, no hay que olvidar que, cuando iniciamos la
ardua lucha contra el ALCA y después contra los TLC, hubo sectores mecanicistas
que no asumieron la tarea, con el peregrino argumento, que esta lucha también
beneficiaba a los empresarios. Lo que primaba no era salvarlos, sino impedir lo
que estamos viendo con el arrasamiento de lo que queda de la producción
nacional. Entonces, por fortuna, la mayoría del FSP, y posteriormente del PDA,
acertamos en la unidad de acción y, hay que decirlo, la lucha tuvo importantes
resultados políticos para la izquierda y
los sectores democráticos.
Dicho lo anterior, con la Marcha del 9 de abril no
cabe la menor duda, de que la dirección del PDA se equivocó al confundir la
unidad de acción frente a un tema específico, con lo que significa el accionar
unitario en política. Mal les queda, a algunos dirigentes del PDA,
editorializar en el sentido de que la exitosa movilización por la paz era para
hacerle el juego a la reelección del presidente Santos o lavarle la cara a la
administración Petro. En esa misma dirección, se equivocan los dirigentes de
las organizaciones sociales que mandaron el mensaje, también equívoco, de no
salir a marchar por la paz.
Los comunistas reconocemos, que nos hemos
equivocado en el pasado al elegir con quien hacer unidad de acción. Por
ejemplo, Gilberto Vieira con gallardía reconoció, que erramos con nuestra
apreciación frente al UNIR, dirigido por Jorge Eliecer Gaitán. No participamos
de la Marcha del Silencio, pero posteriormente rectificamos y organizamos la
resistencia agrarista al lado de los liberales consecuentes, y por eso hemos
compartido sinceramente, que el día de las víctimas sea el 9 de abril, y por
ello, lo más sensato para abrir camino hacia la reconciliación nacional, en
homenaje a las víctimas y por la paz, era marchar.
Frente a la marcha del 4 de febrero del 2008, en
el PDA no nos pusimos de acuerdo. Para entonces, Gustavo Petro se equivocó al
invitar a marchar muy cerca de la movilización uribista contra las FARC.
Nosotros y otros sectores también nos equivocamos al decirle a nuestras bases,
que había que quedarse en la casa, pero el doctor Gaviria, entonces presidente
PDA, acertó al impulsar, temprano, la toma de la Plaza de Bolívar en favor de
la lucha por la paz.
Hoy, lo importante es que se ha generado un gran
hecho político y, siendo consecuentes con el Ideario de Unidad, la lucha por la
paz está al centro de la vida política nacional. Los Progresistas, la Marcha,
el Congreso, Vamos por los Derechos, las bases del PDA y sectores afines al
Gobierno sumamos, en unidad de acción, cientos de miles de compatriotas que,
conscientemente y sin astucias, le apostamos a este propósito común. Las
especulaciones políticas de la compañera Piedad no pueden ser óbice para
soslayar el compromiso por la paz, no bastan las declaraciones.
Compañeros y compañeras: Ni Bolívar se hizo
colonialista por su unidad de acción puntual con los ingleses, ni Mao
nacionalista por su unidad de acción, también puntual, con Chiang Kai-shek. Por
ahora, lo urgente es la solución política y que la guerra cese. Lo prioritario
en estos momentos, es reconocer nuestros aciertos y no recaer en los errores
del pasado. Lo coherente es trabajar juntos por un frente político amplio, que
más allá de la unidad de acción, nos conduzca a enfrentar unitariamente a los
diferentes sectores de la oligarquía, que en lo esencial, no tienen
contradicciones antagónicas entre sí.
Alfredo Holguín M.
Militante de base del PCC
Coordinación europea del PC/JC
Miembro de la Fundación Walter Benjamin
Tynset, Noruega, Abril 10 / 2013
http://www.pacocol.org/index.php/noticias/3467-el-pda-y-su-equivoco-en-la-lucha-por-la-paz