Sábado 13 Abril 2013
El 12 de abril de 2013, la hija de la defensora de derechos humanos Claudia Julieta Duque fue fotografiada por un desconocido cerca de la casa de su padre. El hombre la sacó una foto en primer plano antes de retirarse rápidamente. Previamente, el 10 de abril de 2013, fue fotografiada mientras estaba con su novio, también cerca de la casa de su padre.
Estos incidentes son los más recientes en una
campaña de intimidación y acoso contra la defensora de derechos humanos desde
el 12 de marzo de 2013, cuando se hizo público su caso contra siete
funcionarios de la ahora disuelto Departamento Administrativo de Seguridad
(DAS), en relación con la tortura psicológica contra ella. Claudia Julieta
Duque es una periodista que trabaja como corresponsal del Equipo Nizkor y Radio
Nizkor en Colombia. Front Line Defenders emitió una actualización el 22 de
marzo de 2013 con respecto a la detención de los siete funcionarios acusados de
su tortura psicológica durante un período de años.
Desde el 12 de marzo de 2013, Claudia Julieta
Duque ha sido la sujeta de una campaña de intimidación y acoso. En la mañana
del 13 de marzo de 2013, su hermano recibió una llamada telefónica de un hombre
quien se identificó como Elkin Perdomo de la Unidad Nacional de Protección
(UNP). El hombre pidió su número de teléfono y su dirección, diciendo que tenía
que ver con la elaboración de un nuevo estudio de seguridad. Sin embargo, el estudio
se realizará en junio y Claudia Julieta Duque está en contacto directamente con
las personas que realizarán el estudio.
Ese mismo día, alrededor de las 12:30 pm, la
defensora de derechos humanos estaba en la peluquería cuando se dio cuenta de
que un hombre desconocido en un taxi la estaba vigilando. Lo observó durante 40
minutos antes de la llegada de la Policía, y en ese momento se fue el hombre.
El 15 y 16 de marzo de 2013, Claudia Julieta Duque
recibió dos archivos a su equipo desde la misma dirección de correo
(porladignidadmilitar@…). Ambos eran archivos ejecutables, hecho que la hizo
creer que eran virus y a eliminarlos. Como la defensora de derechos humanos
está consciente de que su teléfono este intervenido, mencionó esto varias veces
por teléfono el 17 de marzo de 2013, y no recibió más archivos de este tipo.
Esa noche, la hija de Claudia Julieta Duque notó un taxi, oculto de la vista de
la cámara de seguridad de su apartamento, observando su vivienda por más de una
hora.
Unos días más tarde, el 21 de marzo de 2013,
aproximadamente a las 11 am, un subintendente, diciendo que era de la Dirección
de Derechos Humanos de la Policía, llegó al apartamento de la defensora de
derechos humanos. Dijo que sabía que la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos la había otorgada medidas cautelares desde el 2008, cuando de hecho es
desde el noviembre del 2009, y querría averiguar si la Policía la ofrecía
protección suficiente.
A Claudia Julieta Duque le extraño que la había
preguntado eso en una manera tan casual y por eso no dejó entrar al hombre sino
que hablaba con él por citófono. Ella pidió un número de teléfono en el cual
podía comunicarse con el hombre, pero no cumplió con esta petición.
Front Line Defenders considera que esta campaña de
acoso esta directamente relacionado con el trabajo legítimo de Claudia Julieta
Duque en defensa de los derechos humanos en Colombia, y en particular con su
caso en contra del DAS. Estos últimos incidentes de la observación de su hija
constituyen una escalada de esta campaña, y pasa en el contexto de la continua
intimidación de los defensores de los derechos humanos en Colombia. Front Line
Defenders está manifiesta su profundo preocupación por la integridad física y
psicológica de Claudia Julieta Duque y su familia.
Fuente
Front Line Defenders