Por: Prensa Rural.
Jueves 6 de Junio 2013.
El nuevo "falso positivo" se presentó en la vereda El Coral, Corregimiento de Puerto Claver, en la región de Guamocó
La Asociación
de Hermandades Agroecológicas y Mineras de Guamocó (AHERAMIGUA), pone
en conocimiento la siguiente denuncia pública, por el asesinato del
joven Anison Cardozo Flores, de 17 años de edad, miembro de Aheramigua ,
al cual están señalando como un guerrillero muerto en combate.
El día 4 de Junio del año 2013 el joven Anison Cardoso Flórez y su
hermano salen de caza a las 8 pm en busca de una guagua (animal nocturno
típico de la región) y una vez la localizan proceden a realizar
disparos contra el animal, casi media hora después, mientras los jóvenes
estaban en busca del animal muerto, el ejército nacional representado
en el Batallón Energético Vial # 5, específicamente el Batallón Cerro
Perico ubicado en el corregimiento Puerto Claver del municipio del
Bagre, Antioquia, abre fuego contra el joven y su hermano, resultado
muerto el primero.
En posteriores declaraciones el ejército señala al joven como un
guerrillero dado de baja, esto claramente es mentira pues existen
pruebas que Anison Cardozo Flórez venía desde hace más de un año
perteneciendo al equipo de trabajo de la Asociación. Así mismo era un
joven reconocido en la comunidad y nunca duró largos periodos de tiempo
por fuera de la vereda el Coral, en donde vivía junto a su familia.
En el día de hoy la familia se encuentra en los trámites pertinentes para darle sepultura al cuerpo de nuestro compañero.
Nuevamente el ejército nacional de Colombia se encuentra violando los
derechos humanos y el derecho internacional humanitario, al asesinar
vilmente a un miembro de la población civil a demás de ser este persona
protegida ante el DHI por ser defensor de Derechos humanos.
La violación al DIH por parte del estas tropas del Ejército Nacional
al no portar sus distintivos de batallón, rango y nombre, nos recuerda
el modus operandi de los escuadrones paramilitares que tanto daño
realizaron al tejido social de la población rural en el sur de Bolívar.
El constante señalamiento por parte del ejército hacia los defensores
y defensoras de derechos humanos como colaboradores de los diferentes
grupos armados al margen de la ley, es en todo sentido, es manejo del
lenguaje riesgoso, y por lo tanto pone es estado de vulnerabilidad total
tanto a los individuos, como los procesos organizativos, que
reivindican su derecho a vivir en paz, estos articulados en AHERAMIGUA