Lunes 19 de Agosto 2013
/ Lunes 19 de agosto de 2013
El 18 de agosto de 2013, desde las diez de la noche y durante toda la
madrugada, en la salida que va de Villavicencio al municipio de Acacías
en intersección con la entrada del barrio Porfía, se encontraron
inmovilizados los buses en el que se transportaban campesinos de
diferentes municipios del Meta y la región del Losada Guayabero.
Cerca de diez buses fueron inmovilizados por el Comando Fuerzas
Especiales Urbanas del Ejército Nacional en cabeza del líder
identificado como “Gladiador”, junto con un patrullero de la Dijín y
miembros de la Policía Nacional, exigiendo cédula y huella dactilar a
los campesinos, con la excusa de revisar antecedentes. El Ejército
estuvo consignando los números de los buses, nombres de conductores y de
varias personas en libretas por varios de sus militares.
A medida que la Fuerza Pública iba reseñando a los campesinos dejaba
seguir los buses. Sin embargo, hubo varias horas en las que no se
realizó ninguna actividad y cuando los automotores se dispusieron a
continuar su destino, la Fuerza Pública retomó el empadronamiento.
La Fundación por la Defensa de los Derechos Humanos y Derecho
Internacional Humanitario del Oriente y Centro Colombiano (DHOC) se hizo
presente durante el transcurso de la irregularidad, acompañando a las
comunidades en todo momento.
Un hecho a destacar fue que uno de los miembros del Ejército Nacional
agredió verbalmente a una de las corresponsales de REMA ACPP,
amenazándola por su calidad de periodista.
Los últimos buses retenidos lograron transitar a las cinco de la
mañana, completando aproximadamente las tres mil personas hasta ese
momento. Sin embargo la movilización de vehículos continuó hasta los
puntos de concentración el resto del día.
A pesar de los hostigamientos de las fuerzas estatales, la gente
sigue en pie y el paro no cede. En palabras de uno de los campesinos:
“…Y si no nos dejan continuar, ¡pues bloquemos acá!”.