Las Farc condicionaron este sábado la entrega de los diez secuestrados que prometieron dejar en libertad a finales de 2011.
En un comunicado, aunque aseguran que “estamos listos para iniciar el proceso de liberación, en dos jornadas, de 10 prisioneros de guerra en nuestro poder”, advierten que hace falta una condición.
“Sólo hace falta que el presidente Juan Manuel Santos permita la visita humanitaria proyectada por Mujeres del Mundo por la Paz a los prisioneros políticos y de guerra en los centros de reclusión del país”, señalan en su misiva las Farc.
Además, indican que “es un contrasentido que el gobierno de Colombia niegue la existencia de estos solo para obstruir dicha visita, cuando el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, INPEC, atendiendo un derecho de petición, acaba de reconocer la existencia de 15.000 prisioneros políticos”.
Y concluye: “Esta es una realidad inocultable en un país que sigue atravesando décadas de conflicto armado”.
La pelea por la visita lleva varios días. El pasado 6 de marzo el ministro de Justicia, Juan Carlos Esguerra, en sendas cartas dirigidas a la exsenadora Piedad Córdoba y a varios congresistas, expresó su decisión de remitir al despacho del presidente Juan Manuel Santos la solicitud elevada ante él para que se autorice el ingreso de la “Comisión Internacional de Observación de los Derechos Humanos en los Establecimientos Carcelarios” a diferentes cárceles del país.
En la comunicación el ministro se mostró “sorprendido con los últimos pronunciamientos públicos en el sentido de que tales visitas tendrían como población objetivo a los 'presos y presas políticos, de guerra y de conciencia' -que, como dije, no existen en Colombia- y de que la Comisión de Mujeres tendría la misión de 'mediar', sin que el Gobierno la hubiera autorizado para ello".
El jefe de la cartera de justicia basó su decisión en el hecho de que, a la luz de los últimos comunicados y declaraciones a los medios de comunicación, trascendió que el carácter de estas visitas no era precisamente el que se había enunciado. En efecto, “mientras que siempre fueron planteadas como de carácter humanitario para verificar las condiciones de quienes se encuentran privados de la libertad, ahora ha venido a decirse que se trata de la 'cuota inicial' del proceso de paz entre la guerrilla y el Gobierno", dijo el ministro.
En ese sentido, el 9 de marzo la exsenadora Piedad Córdoba pidió una cita al Jefe de Estado para tratar temas relacionados a las liberaciones.
Ese día, Córdoba se comunicó con el secretario privado de presidencia, Juan Carlos Mira, para que él sea quien establezca la hora y el día de dicho encuentro.
Sin embargo, pocas horas después de esa petición, el presidente Santos desechó que pueda reunirse en los próximos días con la exsenadora Piedad Córdoba Ruíz.
Al conocer que la exlegisladora pidió esa cita, el mandatario descartó cualquier cita al recordar que el delegado del gobierno en las liberaciones es el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
“Quiero reiterar que el vocero del gobierno para tema liberaciones es Mindefensa. Hemos cumplido con todo y estamos listos para operativo”, escribió Santos en cuenta de la red social Twitter.
De momento, se desconoce una respuesta del Gobierno alrededor de la petición de las Farc.
Comunicado de las Farc
1. Informamos al grupo de Mujeres del Mundo por la Paz coordinado por Piedad Córdoba, y a la organización Asfamipaz, que estamos listos para iniciar el proceso de liberación, en dos jornadas, de 10 prisioneros de guerra en nuestro poder.
2. Manifestamos nuestro acuerdo con los ítems del protocolo de seguridad. Sólo hace falta que el presidente Juan Manuel Santos permita la visita humanitaria proyectada por Mujeres del Mundo por la Paz a los prisioneros políticos y de guerra en los centros de reclusión del país. Es un contrasentido que el gobierno de Colombia niegue la existencia de estos solo para obstruir dicha visita, cuando el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, INPEC, atendiendo un derecho de petición, acaba de reconocer la existencia de 15.000 prisioneros políticos. Esta es una realidad inocultable en un país que sigue atravesando décadas de conflicto armado.
Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC-EP
Montañas de Colombia, marzo de 16 de 2012.