La Unión Europea firmó este martes un Tratado de Libre Comercio (TLC) con
Perú y Colombia, el último paso antes de la votación en el parlamento europeo
para que entre en vigor.
El acuerdo "impulsará el comercio y la inversión", lo que
adquiere particular importancia en este "contexto de crisis" de la
deuda europea, señaló el comisario de Comercio, Karel de Gucht, al firmar el
acuerdo.
La Eurocámara deberá ahora dar su aval al acuerdo que aportará un beneficio
mutuo estimado en 500.000 millones de euros, durante la votación en sesión
plenaria prevista el próximo 24 de octubre.
El pleno de la Eurocámara, en la ciudad francesa de Estrasburgo, aprobó
hace más de diez días una resolución de apoyo al TLC con los países andinos,
pero exigió a Colombia y Perú "definir una hoja de ruta" para
garantizar la protección de los derechos laborales, el medio ambiente y los
derechos humanos, antes de la votación.
El acuerdo -que también debe ser aprobado por el congreso colombiano-
incluye una cláusula específica con temas que obstaculizaron los avances de las
negociaciones entre las partes, concluidas en 2010.
De no cumplirse esta clásula, la Unión Europea podrá suspender el pacto de
forma unilateral. Con el acuerdo "ganamos mucho ya que vamos a llegar a un
mercado de 503 millones de consumidores con alto poder adquisitivo",
señaló el ministro colombiano de comercio, industria y turismo, Sergio Díaz
Granados.
Y también ganan los europeos. "La mejor forma para salir de una crisis
es fomentando el comercio, pues éste ayuda a la generación de empleo y a la
transformación de tecnología", añadió. Tanto el parlamento europeo como el
congreso colombiano pueden aceptar o rechazar el acuerdo tal como está, pero no
pueden modificarlo.
El tratado prevé una liberalización gradual total del comercio de
mercancías y servicios, lo que según la Comisión Europea redundará tanto para
Colombia como para Perú en un aumento del Producto Interior Bruto (PIB) de
cerca del 1 por ciento.
Las negociaciones para el TLC habían arrancado con el conjunto de los
países andinos, pero Bolivia y Ecuador (los otros dos miembros de la Comunidad
Andina de Naciones) se descolgaron del proceso al rechazar que el acuerdo
incluyera un tratado de libre comercio.
La Unión Europea ha sido tradicionalmente uno de los socios comerciales más
importantes de Colombia, ocupando en 2011 el segundo lugar como destino de sus
exportaciones (15,6%), después de Estados Unidos (38,1%) y por delante de China
(3,5%), Ecuador (3,4%) y Venezuela (3,1%). La UE es también el segundo destino
de las exportaciones peruanas, con una participación de 15,7%.
Varias Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) protestaron por el avance
de este acuerdo con Perú y Colombia, donde denunciaron que siguen cometiéndose
violaciones a la libertad sindical, entre otras irregularidades contra los
derechos humanos.
Según un informe de la Confederación Sindical Internacional (CSI), Colombia
fue en 2011 el país con más personas asesinadas (29) en el mundo por sus
actividades sindicales. "Lo que puedo decir es que el país no sólo ofrece
garantías para el derecho de asociación y la negociación colectiva (...) sino
que además cuenta con una legislación que protege el medio ambiente y la
biodiversidad", aseguró Díaz Granados.
CON AFP